Bodegas Real, 28 de junio del 2011.- La OIV ha hecho públicos sus datos sobre el consumo de vino en todo el mundo. Reproducimos a continuación sus conclusiones. Si el mundo perdió en 2010 un 0,8% de la superficie de viñedos y la producción global de vino cayó a niveles de 1998 (263,8 Millones de hectolitros o Miohl), el sector vitivinícola puede aún apoyarse en los consumidores: el
consumo global de vino creció un 0,4% hasta alcanzar los 238 Miohl, rompiendo
la tendencia a la baja iniciada en 2007. De entre los cinco mayores mercados
vinícolas, Estados Unidos, Alemania y China son los que impulsan este ligero
crecimiento.
Lo que precede es únicamente parte del esbozo sobre la situación del sector
vitivinícola mundial que ha presentado el lunes 20 de junio Federico
Castellucci, Director General de la Organización Internacional de la Viña y el
Vino (OIV), el principal organismo intergubernamental de carácter
científico-técnico y de competencia reconocida en los ámbitos del vino, la viña
y todos aquellos productos que de ella se derivan.
“Tras un periodo de crecimiento ininterrumpido que se remonta al año 2000, las
exportaciones globales de vino invirtieron la tendencia en 2008 a causa de la
crisis económica, y en 2009 prosiguieron su descenso. Sin embargo, en 2010 la
tendencia ha retomado el rumbo al alza y el volumen global de los vinos
exportados es ampliamente superior al que se registró en 2006 y en años
anteriores”, ha afirmado Castellucci.
El Director General de la OIV intervino en la ceremonia de inauguración
del XXXIV Congreso Mundial de la Viña y el Vino. Este acontecimiento se celebra del 20 al 27 de junio
en el centro de congresos de la Alfandega, en la ciudad portuguesa de Porto,
seguido inmediatamente por la asamblea general anual de la OIV.
Este XXXIV Congreso Mundial de la Viña y el Vino ha sido organizado bajo la
supervisión del ministerio portugués de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural
por “Um Porto Para O Mundo”, asociación privada sin ánimo de lucro creada
especialmente para este acontecimiento y que goza del pleno apoyo de la OIV.
Balance global del sector vitivinícola
El “Informe OIV sobre el estado del mercado vitivinícola mundial” ofrece un
retrato preciso de las principales tendencias que afectan al sector del vino en
el ámbito internacional, durante mucho tiempo bajo el dominio de los países
europeos pero cada vez más enfrentado a los desafíos procedentes de las
industrias vinícolas en expansión de América, Australia y Asia (China en
particular).
El informe se centra en tres grandes categorías de indicadores: superficie
cultivada de viñedos, producción de uva y mercado del vino (producción, consumo
y comercio internacional). En cada una de estas categorías se establece una
clasificación de los diferentes países que desempeñan un papel relevante en el
sector vitivinícola, independientemente de su adhesión a la OIV.
En lo que se refiere a los viñedos, los datos acerca de la superficie global
cultivada muestran una regresión de 61.000 hectáreas en 2010 respecto al año
anterior, situándose en 7.586.000 hectáreas frente a las 7.647.000 hectáreas de
2009. España, Francia e Italia siguen poseyendo los viñedos más extensos, pero
todos ellos acusan esta regresión, mientras que la superficie de viñedo en
China, Estados Unidos y Argentina crece.
Tras un ligero repunte en 2008 y una estabilización en 2009, la producción
global de uva ha experimentado un descenso del 3% en 2010 (alcanzando 644,9
millones de quintales) respecto a 2009 (675,3 millones de quintales), y
acercándose a los niveles de 2007 (665,2 millones de quintales).
La situación global del sector en 2010 también registra una interrupción de la
tendencia al alza en la producción de vino, la cual, tras un incremento en 1,1
Miohl de 2008 a 2009, se reduce en cerca de 7,4 Miohl (-2,7%) de 2009 a 2010.
Por otro lado, el consumo de vino se recupera ligeramente de la caída del 3,6% registrada en 2009, pasando de los 236,5 Miohl consumidos en 2009 a los 238 Miohl consumidos en 2010.
Castellucci también presentó la evolución de los intercambios globales de vino en 2010, marcados por unos incrementos respectivos de un 7% en las exportaciones y de un 3,3% en las importaciones,
que representan 6,2 Miohl y 2,8 Miohl.
A la vista del contexto económico desfavorable que sufre al sector vitivinícola, Castellucci ha recomendado un compromiso firme a los Estados miembros de la OIV para alcanzar las metas que
establece el Plan Estratégico trianual de la organización, con el objetivo de
minimizar el impacto de la crisis económica global en los productores y
consumidores.